Historiador naval norteamericano de la Old Dominion University, de Virginia, y del US Naval School, que desde hace más de 40 años desarrolla sus investigaciones en archivos del mundo entero. A partir de los documentos secretos de la Marina Alemana descubrió y descifró la Operación Úrsula, que hizo pública por primera vez en 1988. Desde entonces ha continuado estudiando éste y otros episodios navales de la Guerra Civil Española, aspecto del que es el máximo especialista mundial.
Abogado malagueño cuya afición a la navegación y la pesca deportiva le llevó a localizar el naufragio del submarino, siguiendo las gotas de gasoil que emergían en el mar a 5 millas de distancia frente a las playas del Palo. Tras una tenaz investigación, consiguió que la Marina Española certificase que se trataba del C-3 y, desde entonces, ha estado ligado a su historia, tratando de unir todos sus pedazos, para que tripulantes y descendientes reciban el reconocimiento que el silencio histórico les había negado.
HISTORIADORES:
Ángel Viñas y Paul Preston son seguramente las dos voces más autorizadas en torno a la Guerra Civil Española, particularmente a la hora de estudiar las circunstancias de su estallido y la dimensión internacional del conflicto. Han desarrollado una gran labor de investigación y difusión en libros, conferencias y series de televisión. Preston es profesor en la London School of Economics & Political Science y autor de libros como “La República asediada”, “Franco” o “La Guerra Civil Española”, entre otros muchos. Viñas desempeña actualmente el cargo de director de relaciones multilaterales en la Comisión Europea y entre sus libros más conocidos se cuentan “Franco, Hitler y el estallido de la Guerra Civil”, “Guerra, dinero, dictadura: ayuda fascista y autarquía en la España de Franco” y “En las garras del águila: los pactos con Estados Unidos, de Franco a Felipe González”.
Pablo Díaz Morlán es el historiador que mejor conoce la vida y negocios de Horacio Echevarrieta, el empresario vasco y personalidad en la vida española de los años 30 que aparece retratado en esta película. En su libro “El capitalista republicano”, Díaz Morlán –profesor de la Universidad de Alicante- aborda los negocios que Echevarrieta realizó con Alemania desde su malagueña finca de la Concepción y entre los que se cuentan la compañía Iberia, una fábrica de torpedos o un submarino alemán construido en sus astilleros de Cádiz.
HISTORIADORES NAVALES:
Tres marinos que unen a su experiencia vital en submarinos el estudio de la guerra bajo el mar.
Uno es el contralmirante José Ignacio González-Aller, que -además de haber estado al frente de la Zona Marítima del Estrecho, del Museo Naval y del Instituto de Cultura Naval-, es coautor del libro “Los submarinos republicanos en la Guerra Civil Española”.
LOS VETERANOS ALEMANES:
Dos tripulaciones navegaron desde el Mar del Norte hasta el Mediterráneo en los u-boots alemanes asignados a la Operación Úrsula: el U-33 y el U-34.
Aunque todos juraron guardar el secreto de por vida, en los años 70 el investigador Willard Frank consiguió que uno de sus oficiales, el entonces almirante Gerb Schreiber, confirmara por escrito la existencia de aquella misión y el hundimiento del C-3. Después de 70 años y con una guerra mundial de por medio, ninguno de aquellos hombres ha sobrevivido.
MARINEROS SUPERVIVIENTES:
De entre quienes vivieron la Guerra Civil a bordo de submarinos españoles, dos voces hablan de aquella experiencia.
La primera corresponde a Ramón Cayuelas, joven marinero que se salvó del hundimiento del C-5 (submarino hermano del C-3), y que ha contado su experiencia en el libro “Relatos inéditos de submarinos en la Guerra Civil Española”.
FAMILIARES Y DESCENDIENTES DE LA TRIPULACIÓN DEL C3:
Francisca del Río era esposa del segundo maquinista, José Sastre, y cuenta cómo fue la despedida, consciente del destino de aquel submarino, y los años que pasó esperando que volviera su marido. Su testimonio está grabado a la edad de 101 años, poco antes de su fallecimiento.
TESTIGOS DE LA EXPLOSIÓN:
Aquel mediodía de invierno de 1936, la explosión del C-3 en la bahía de Málaga fue vista y oída por numerosas personas en toda la ciudad. Eso no impidió que las circunstancias de la guerra condujeran a su postergación entre otras muchas desgracias y acontecimientos y, finalmente, a un aparente olvido del que ahora ha podido salir.
Julián Almoguera es el último carpintero de ribera que construye las tradicionales jábegas y otras barcas de madera. Su casa y taller siguen sobre la playa desde la que vio explotar el C-3. También describe la explosión Rafael Heredia, pescador del Palo que, siendo apenas un chaval, estaba faenando en aquel momento. Un último testimonio lo aporta Cristóbal Criado, entonces miembro de las Juventudes Socialistas, que aún recuerda los acontecimientos de una ciudad que poco después iba a perder su memoria.
1 comentario:
Me gusta conocer un poco de historia y por eso soy de leer mucho sobre diversos temas que me encantan. Ademas tengo muchos otros intereses. Siempre me ha gustado ver los deportes por la tele y además anhelo en ser un experto en programacion
Publicar un comentario